Vivanco recientemente ha criticado fuertemente la gestión de ambos mandatarios, por su accionar ante la pandemia de la Covid-19
“ @Idania Chirino Pregunta quién viola DDHH con políticas contra Covid-19: ¿Bukele (políticas draconianas) o Ortega (no hace nada)?” escribió el abogado en su cuenta de Twitter.
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Twiter de José Miguel Vivanco
En el mismo tuit, Vivanco dio la respuesta, donde asegura que ambos líderes han violentado los Derechos de los ciudadanos de las dos naciones.
“Respuesta correcta: ambos. Gobs deben tomar medidas para proteger a población, pero estas deben ser proporcionales y respetuosas de estado de derecho”, escribió.
El actuar de Bukele y Ortega ante la pandemia, que a la fecha registra a nivel mundial 2.665.122 contagios y 186.131, según el mapa actualizado de la Universidad John Hopkins, es contrastante.
Por un lado, el mandatario de El Salvador es catalogado de autócrata y cuestionado por Vivanco debido al abuso de poder de entidades estatales, como la policía y el ejército, lo cual ha generado que cientos de personas hayan sido arrestadas de forma arbitraria y otras sean sometidas a "tratos crueles, inhumanos y degradantes” por violar la cuarentena, concluye un informe de la Procuraduría de Derechos Humano de El Salvador. Aunque Bukele justifica este actuar como una medida para contener la Covid-19
Bukele autócrata y Ortega irresponsable
“El Presidente Bukele actúa como si cualquier política fuera válida para detener la propagación de la Covid-19, incluida la adopción de medidas que han llevado a cientos de arrestos arbitrarios”, dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de Human Rights Watch. “Las fuerzas de seguridad deben estar sujetas a un control estricto y rendir cuentas si cometen abusos, dado su historial, presente y pasado, de comisión de graves violaciones de derechos humanos”.
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Por otro lado, Ortega no ha tomado ninguna medida, para contener la pandemia en Nicaragua, no ha cerrado las fronteras, ni ha suspendido las clases presenciales como lo han hecho El Salvador y otros países, al contrario, es acusado de querer propagar la enfermedad, porque convoca a sus empleados, simpatizantes de su partido y ciudadanía en general a participar en marchas, aunque esto no cumple con las medidas recomendada por organismos internacionales.
Sin embargo, tanto Bukele como Ortega, justifican sus medidas y aseguran que todas las actividades que ejecutan como los decretos que aprueban son en favor de la ciudadanía.