“Para la UNAB, esta ausencia por más de 30 días, de Ortega, en medio de la situación en que estamos es una irresponsabilidad criminal que va a ser catalogada en su momento como un genocidio virósico, como lo ha denominado nuestro Papa Francisco”, señaló Violeta Granera, Miembro del Consejo Político de la UNAB.
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Violeta Granera califica de genocidio virosico la desaparición de Daniel Ortega ante la pandemia de coronavirus
Además, señaló que es “absolutamente inadmisible que pretenda la dictadura estar manejando la situación a través del teléfono, es absolutamente de una irresponsabilidad inaudita que Ortega no haya dado la cara, para decir qué es lo que va a hacer el Estado de Nicaragua y qué es lo que no va a hacer, porque está haciendo cosas muy inadecuadas y peligrosas, para asumir la responsabilidad que tiene, que además es constitucional para tomar todas las medidas para proteger al pueblo de Nicaragua en medio de la pandemia”.
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Asimismo, Granera hizo énfasis en que circulan rumores de que si el presidente Ortega está muerto o está enfermo “y nada de eso tiene importancia”.
“De lo que debemos estar claros y no olvidar es que este hombre ha sido un irresponsable que ha volteado a ver al pueblo de Nicaragua para matarlo violarnos nuestros derechos”, dijo Granera.
Por su parte, Alexa Zamora, también del Cosejo Político de la UNAB, dijo que no les resulta inaceptable la forma en que está procediendo el gobierno de Ortega, dado que es inaudito que “en un contexto tan delicado como el que nosotros estamos viviendo, de cara al Covid-19, el jefe de Estado tenga más de 30 días de no dar apariciones en públicas, de no dar entrevistas, de no dar orientaciones”.
“Actualmente, pareciera que somos un país acéfalo en el cual el Ejecutivo, que es el que debería estar al frente de los protocolos a implementar en cuanto a una potencial crisis sanitaria, ha desaparecido, no hay noticias oficiales de dónde está, qué está haciendo. Por otro lado, hay una vicepresidenta que cree que se puede dirigir el país desde el teléfono, desde un comunicado leído todos los días en los canales oficiales, en los cuales se da información completamente manipulada y tergiversada, que pone en riesgo la salud de todos los nicaragüenses”, prosiguió Zamora.
Además, asegura que en el país no tenemos orientaciones reales de qué es lo que va a pasar con las 26 mil pruebas que el Banco Interamericano de Desarrollo entregó al estado de Nicaragua.
Finalmente, Zamora manifestó que “no hay noción real de los pasos que el Estado debería estar tomando de manera responsable ante el potencial contagio de los nicas, pues se están dando orientaciones contradictorias a las de las organizaciones de salud, mientras Ortega se atrinchera en su búnker personal”.
