Según señalaron algunos vecinos del sector, el llanto desgarrador y agobiante de la recién nacida les llamó la atención a todos en el barrio Plutarco Elías Calles, de la colonia Santiago Norte. Asimismo, dijeron que al notar que la criatura no dejaba de llorar, se preocuparon y comenzaron a averiguar de dónde provenía. Lo que descubrieron horas después resultó impactante, pues la niña estaba entre dos paredes, cuya separación era muy estrecha.
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De acuerdo con medios locales, la bebé, a quien su progenitora lanzó desde una azotea dentro de un espacio estrecho, entre dos paredes, a más de tres metros de profundidad, fue rescatada aún con vida.
Para realizar la hazaña del rescate tuvieron que romper el muro de una de las viviendas para ejecutar de forma exitosa la tarea de sacar a la menor.
A la niña la envolvieron en una sábana y tras un chequeo previo, la trasladaron a un centro asistencial en condición delicada.
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Con respecto a la otra niña, el abuelo de la joven explicó a los reporteros que la joven tuvo un aborto espontáneo, pero se dio cuenta un día después, cuando ella se dio a la fuga.
