Históricamente las fuentes de agua del Pacífico se secan durante la temporada de verano, sin embargo, las actuales condiciones climáticas más la deforestación y el avance de la frontera agrícola ayudan a que el recurso hídrico merme, explicó Jurguen Guevara, oficial de industrias extractivas del Centro Humboldt.“Consideramos que es una situación que debe prestarse especial atención porque de los recursos hídricos dependen las comunidades”, reiteró Guevara.
Según el Centro Humboldt, del monitoreo de 36 fuentes de agua en el país, 34 han perdido su caudal o han tenido disminuciones importantes.“El agua y la recarga hídrica dependen única y exclusivamente de las lluvias, las lluvias han estado mermando por los efectos del cambio climático, pero estos se ven más sentidos en la medida que los recursos naturales estén o no conservados”, declaró el experto.
Guevara indicó que cuando se da el despale el agua no se infiltra en el suelo “por lo que no se pueden recargar los acuíferos”.La situación del río Coco, como de los demás ríos, expone una vez más la problemática que persiste en el país.“Tenemos unas condiciones climatológicas y eso conjugado con las condiciones de degradación forestal han acrecentado la falta de recursos hídricos”, reiteró.