“Hoy es un día de orgullo y de indignación, duele cantar el Himno Nacional de esta manera, pero gracias a todos ustedes que hoy no instaron a la violencia e hicieron lo que dice el Himno: ‘Ya no se tiñe con sangre de hermanos’. Eso es algo que sentimos por nuestros hermanos que hoy nos enfrentaron con armas como que fuéramos unos delincuentes”, dijo Ramírez.
Frente a las miradas de los campesinos y de fondo la de los antimotines armados, Ramírez expresó: “Lloro por indignación, pero nuestra lucha lucha sigue, apenas comienza. ¿Por qué este gobierno nos trata así? Si sólo somos unos simples campesinos que defendemos nuestra tierra, y no vamos a permitir que el gobierno y un extranjero se las roben”.
La abogada del Movimiento Campesino, Mónica López, sostuvo que este sábado “hemos enviado un poderoso mensaje. Para empezar fuimos más de 500 personas que logramos romper este estado de sitio, un cerco policial igual de perverso del que nos pusieron en la última movilización, y sin embargo aquí estamos”.
Información de: La Prensa