Jorge Matus Téllez, de la Asociación de Comerciantes del Mercado de Jinotepe (ACMJ), al igual que muchos ciudadanos, no encuentran explicación del porqué no se ha hecho el traslado del viejo mercado hacia el nuevo.
En la última reunión que sostuvo la ACMJ con el alcalde se abordó el tema de arrendamiento de los nuevos módulos, fijándose una tarifa de trescientos córdobas, pero sobre los pagos de matrícula, vigilancia, agua y luz, entre otros, no hubo un acuerdo.
“Yo en el 2015 le comenté que esto iba a ser un traslado político, pienso que antes o después de las elecciones nos regalan el mercado”, dijo Ana Cortez, presidenta de la ACMJ. Las familias que viven encerrados en sus casas por que el mercado se ha extendido aun no comprenden que ha pasado y piden que pronto se llegue al consenso. El mercado nuevo de Jinotepe permanece al cuido de un guarda de seguridad y por falta de uso ha sufrido daños en las paredes que se ven sucias y manchadas.