Los delincuentes cada día están intentando más y distintas maneras de dejar en desgracia a sus víctimas, en las calles, en centros laborales y hasta en los hogares donde se supone que las familias se deben sentir más seguras. El colmo es que lo hagan a pocas cuadras de la Policía.
Víctima de ladrones fue un matagalpino que por buen samaritano, perdió algunos de sus bienes como teléfono celular de gama alta, computadora y dinero que había obtenido fruto de su trabajo.
La víctima, quien prefirió no identificarse porque su crítica a la Policía lo puede revictimizar al ser reprimido por los agentes del régimen, relató que al mediodía de este 19 de julio, llegó a su casa –ubicada del edificio de la Policía una cuadra al oeste– un individuo desconocido fingiendo estar hambriento y con mucha sed. Le pidió un vaso con agua.
Confiando en la necesidad que mostraba el ser humano de ser auxiliado por un “mano amiga”, se fue a buscarle el vital líquido. La víctima, le dijo que lo siguiera al segundo piso donde habita para atender su pedido.
Saca cuchillo y lo hiere para robarle
Una vez en el edificio y después de recibir el agua, el delincuente sacó un cuchillo hechizo, iniciando un forcejeo con quien lo estaba ayudando. En la lucha, la víctima terminó con una herida en uno de sus dedos.
“Si no me das reales, te mato”, le gritó el bandido a su víctima. El dueño de la casa al verse herido, se sentó en su cama, rogando al delincuente que no le hiciera más daño. Entonces el malhechor tomó lo que pudo y se fue del lugar sin más demora.
El perjudicado precisó para este reporte que el desconocido se le llevó su iPhone 14 Pro Max, una laptop de última generación, un reloj de pulsera valotado en 300 dólares y de remate, la suma de 500 dólares en efectivo, además de una mochila color negro con otras pertenencias. Además, el vaso donde tomó agua, dejando únicamente sobre la cama el arma blanca.
Denuncia en la Policía
Una vez que la víctima se recuperó emocionalmente del percance, fue a la Policía a denunciar el caso, precisando que el ladrón, se dedica a vender productos químicos para el hogar en las calles de Matagalpa, con lo cual han empezado a rastrearlo.
El matagalpino ofrece 100 dólares de recompensa a quien proporcione la ubicación del sospechoso que termine con su captura.
La zona en que se produjo el robo, es colindante con el parque Morazán y la Catedral donde últimamente ha habido aumento de delincuencia por las constantes ferias que organiza la comuna por órdenes del régimen Ortega-Murillo, sin ningún tipo de seguridad de parte de la policía.