La producción y envasado de esta vacuna se realiza en la planta Mechnikov que tiene la capacidad de producir 300 mil dosis en 24 horas.
Esta planta moderna, que produce medicina con equipos de alta tecnología es el resultado de las buenas relaciones entre Nicaragua y Rusia y este miércoles recibió certificados de calidad y buenas prácticas de manufactura por parte del Centro Estatal de Control de Medicamentos de Cuba, que es reconocido y avalado por la Organización Panamericana de la Salud.
Las autoridades de salud nicaragüense y el Asesor Gubernamental de la Agencia de Promoción de Inversiones y Exportaciones de Nicaragua, Laureano Ortega Murillo, acompañaron un recorrido por las instalaciones a la delegación del viceministro de salud de Rusia, Sergei Kraevoy, que se encuentra en el país.
Cabe mencionar que la producción de medicamentos de la planta es a escala industrial y se prevé seguir realizando estudios de otras vacunas que contribuyan a la salud de las personas.
Para la ministra de salud de Nicaragua, Sonia Castro, esta vacuna contra la influenza es una gran noticia, porque no pondrá en riesgo la salud los grupos de personas más vulnerables frente a la neumonía, como adultos mayores, enfermos crónicos y embarazadas.