Es incluso más vital que los alimentos para mantener el bienestar del organismo, ya que muchas de las funciones del cuerpo dependen del consumo adecuado de líquido. De hecho, “basta una pérdida del 2% del agua corporal para bajar el rendimiento físico y también intelectual”, explica la nutricionista Martha González.
Según la experta, todos debemos recuperar el agua que perdemos para mantener el balance hídrico. Y aunque la cantidad de agua que cada uno debe tomar depende de varios factores como el peso, sexo, cantidad de ejercicio que se realiza, entre otros; siempre se habla de que 2 litros debería ser el consumo ideal diario. Suena fácil, pero cumplir con esa “obligación” muchas veces cuesta bastante, por eso aquí te dejamos algunos trucos para que logres llegar a la meta.
Tips
Usá un vaso pequeño y ancho. Así consumimos un 76% más de agua que en uno alto y delgado, ya que nuestro cerebro “piensa” que estamos tomando una cantidad menor.
Tené agua siempre a mano. Así, cuando sintás ganas de tomar agua no tenés que hacer el esfuerzo adicional de moverte para ir a buscarla.
Usá alarmas para recordar que tenés que tomar agua. Hoy, incluso existen aplicaciones como es el caso de Aqualert que te envía recordatorios para tomar agua, a la vez que registra la cantidad que has tomado y que debés tomar.
Hacé de las infusiones tu mejor aliado. Si tenés la costumbre de tomar infusiones después de almuerzo o a media tarde, sin darte cuenta ya habrás tomado 2 vasos de agua.
Aumentá el consumo de frutas y verduras (1/5 del agua que ingerimos viene incluido en este tipo de alimentos).
“Una manera de saber si estás bien hidratado es ver el color de la orina. Si es un amarillo dorado, faltó agua”. La sed también es un indicativo. “Se trata de un estímulo tardío, si sentís sed es porque ya estás deshidratado”, explica la nutricionista.
Fuente: El Nuevo Diario.