Los servicios sanitarios trasladaron a la mujer al hospital donde los médicos descubrieron que tenía varios cortes en el tórax, abdomen y en las ingles de distinta gravedad. También hallaron heridas que apuntaban a que las mujer había sufrido una agresión sexual. Los médicos notificaron los hechos a la policía que aún sigue buscando al presunto autor de la agresión.
En total, el forense contó treinta heridas recientes y otras más antiguas en el cuerpo de la mujer fallecida. Las más antiguas se le habían infectado causándole también dolores que agravaron más su situación. La anciana también presentaba heridas en los tobillos, posiblemente porque estuvo atada durante la presunta violación.
La anciana no logró recordar su nombre y no llevaba ningún tipo de identificación. Lo único que logró contar es que ella vivía en la calle y que no tenía familiares ni amigos. Respecto al origen de las graves lesiones que presentaba, no supo identificar al autor u autores del hecho.
Fuente:La vanguardia de España