“Para el Gobierno brasileño esta medida demuestra el deterioro de las instituciones en Nicaragua y demuestra un patrón de violación sistemática de garantías individuales y derechos fundamentales en ese país, como ha denunciado Brasil, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA (Organización de Estados Americanos) y el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas”, dice el comunicado.
Asimismo, “El Gobierno brasileño reitera al Gobierno de Nicaragua la necesidad de restablecer de inmediato todas las garantías ciudadanas de un estado de derecho pleno, para que el país pueda regresar a la convivencia democrática de la comunidad internacional”, añade la comunicación oficial. Por su parte la madre de Raynéia, María José Da Costa en un video se quejó de falta de apoyo.
“En relación con lo que se puede hacer desde aquí, de Brasil, yo también me siento triste, deprimida al ver que las autoridades brasileñas también se cerraron a revisar el caso de mi hija. Fue una brasileña asesinada en otro país, no fue un animal. Fue una criatura, un ser humano que se fue con gran cariño, pasando sacrificios y dificultades, llegando al punto de pasar necesidades alimentarias para realizar su sueño de traer a Brasil los conocimientos para salvar vidas, y ver que la justicia brasileña aquí nunca se manifestó, ni siquiera desde la muerte de mi hija hasta ahora”, dijo el miércoles la madre de la víctima.
Antonia Urrejola, relatora para Nicaragua de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, quien expresó que la madre de la joven asesinada puede interponer una denuncia ante el organismo internacional
“La comisión tiene competencia cuando se hayan agotado los pasos internos o bajo determinadas excepciones, como una demora excesiva de la justicia o que no tengan acceso a la justicia”, afirmó Urrejola.
La joven brasileña fue asesinada cerca de la rotonda Universitaria, en residencial Lomas de Monserrat, y venía de trabajar del Hospital Carlos Roberto Huembes. Raynéia llegó casi sin signos vitales, tenía una hemorragia, le hicieron una transfusión de sangre y la llevaron al quirófano, donde confirmaron que una bala atravesó hígado y tórax. Era una bala de alto calibre, porque el orificio que causó era de 15 centímetros, detallaron fuentes hospitalarias.
La Policía aseguró que el autor de los disparos fue Pierson Adán Gutiérrez Solís, quien utilizó una carabina M-4 contra el vehículo que conducía la joven.
Un tribunal de Managua lo procesó a puerta cerrada en un juicio que duró 35 minutos, luego que este supuestamente confesara el crimen, lo condenó a 14 años de prisión y el 23 de julio pasado fue liberado por la Ley de Amnistía
Fuente:El Nuevo Diario