El diputado Germán Altamirano denunció este martes el daño al medio ambiente causado por los gobiernos de Honduras en los últimos 10 años.
A través de su cuenta en Twitter aseguró que 'en una década de dictadura en Honduras han destruido y negociado con nuestros recursos naturales'.
Altamirano, del partido opositor Libertad y Refundación, exigió en nombre de esa fuerza política 'la defensa, conservación y restauración de los ecosistemas para la convivencia armónica del ser humano con la naturaleza. #FueraDictadura #FueraJOH'.
Honduras cuenta con gran diversidad de flora y fauna, así como una riqueza geográfica. En ese entorno sobresalen 40 zonas protegidas, 20 parques nacionales y lugares declarados como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: Copán, la biosfera del Río Plátano, la biosfera de San Marcos de Colon, y la biosfera transfronteriza Trifinio-Fraternidad que comparte con Guatemala y Honduras.
Sin embargo, numerosos proyectos mineros e hidroeléctricos en la última década no solo han afectado el medioambiente de esta nación sino que han acrecentado las luchas de los defensores de la madre tierra.
De acuerdo con el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras y otras organizaciones nacionales e internacionales, es frecuente la criminalización de las personas que luchan por la defensa de la Madre Tierra.
Honduras ocupó el primer lugar de vulnerabilidad ante los efectos del cambio climático entre 1997-2016, según el informe de Germanwatch (2016), una organización no gubernamental alemana.
La ubicación geográfica, el uso inadecuado de los recursos naturales y otros aspectos convierten a Honduras en un lugar totalmente vulnerable a ser atacado por los fenómenos extremos.
A ello se suman la deforestación acelerada, incontrolable tala ilegal de madera e incendios, incluso en áreas protegidas.
La erosión y contaminación que generan las empresas mineras, también ponen en riesgo al país y a su población ante inundaciones y aumento de enfermedades de personas y la fauna local.
