De acuerdo al anuncio, Pyongyang planea lanzar cuatro de sus misiles Hwasong-12 sobre Japón, hacia las aguas de la pequeña isla, territorio estadounidense, que alberga a unos 7.000 soldados en dos bases militares, y es hogar de unos 160.000 habitantes.
Japón y Corea del Sur han prometido una fuerte reacción si el Norte ejecuta su plan.
Corea del Norte dijo que el plan —en el que calcula que sus misiles explotarían a unos 30 o 40 kilómetros de Guam— será enviado al líder norcoreano Kim Jong Un para su aprobación dentro de más o menos una semana. Sería decisión de Kim realizar o no el ataque.
Aunque el régimen norcoreano es conocido por su belicosa retórica y declaraciones exageradas, el anunció elevó las preocupaciones de la comunidad internacional.
De llevar a cabo el ataque —aún si los misiles son lanzados a las aguas cercanas a Guam y no a la isla en sí misma— eso supondría una amenaza potencial para el territorio estadounidense y dejaría a Estados Unidos en una situación más complicada de lo que hasta ahora ha estado con los lanzamientos de misiles de prueba previos.
Guam está a unos 3.400 kilómetros de la Península Coreana y es extremadamente improbable que el gobierno de Kim se arriesgue a ser aniquilado con un ataque preventivo contra ciudadanos estadounidenses. No obstante, no está claro el grado de confiabilidad de los misiles norcoreanos en el caso de un blanco distante y preciso como Guam, por lo que nadie puede descartar el peligro de una confrontación nuclear.
De acuerdo al plan, los misiles norcoreanos Hwasong-12 volarían sobre las prefecturas japonesas de Shimane, Hiroshima y Koichi durante 1.065 segundos antes de caer en aguas cercanas a Guam. Por su parte, Washington ha estado probando sus defensas antimisiles en respuesta al acelerado desarrollo tecnológico norcoreano y a las actuales tensiones, y podría tratar de derribar los misiles coreanos a medio vuelo si detecta que se dirigen a Guam.
Pero eso a su vez podría desatar un ataque preventivo del Norte, que tiene misiles capaces de golpear a Tokio y armas convencionales que podrían devastar Seúl, la capital surcoreana.
Estados Unidos tiene baterías antimisiles Patriot en Guam, Japón y en Corea del Sur. En Guam cuenta además con aviones bombarderos como el B-2 furtivo, B-1 y B-52, así como submarinos nucleares para ataques rápidos.
VOA