El subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos de la Secretaria de Gobernación, Humberto Roque Villanueva, detalló que se han registrado 29.000 deportaciones menos que en el mismo periodo del último año de gobierno del presidente Barack Obama.
El funcionario federal indicó que aun cuando es complicado, México no quitará el dedo del renglón e impulsará una reforma migratoria que garantice el respeto a los derechos humanos de los connacionales que radican en la Unión Americana.En un encuentro con diputados de la Comisión de Relaciones Exteriores para preparar la Reunión Interparlamentaria México-Estados Unidos que se realizará el 6 de junio, dijo que hasta ahora no se han dado deportaciones masivas, sin embargo no se debe bajar la guardia.
“Creo que nuestros parlamentarios, que creo estarán totalmente a la altura de las circunstancias, lo primero que deben plantearle a sus colegas norteamericanos es el respeto a los derechos humanos de nuestros migrantes y segundo no quitar el dedo del renglón de la necesaria reforma migratoria que por diversos motivos se ha ido quedando en el olvido entre los parlamentarios norteamericanos, sinceramente es difícil pensar que se logre”.
Ante el inicio de las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, Roque Villanueva dijo que los derechos de los migrantes no serán moneda de cambio.
“México no va negociar por parcialidades porque esto se presta a monedas de cambio y para nosotros ningún mexicano es moneda de cambio si es migrante, ni tampoco ningún trabajador mexicano que se beneficie del Tratado de Libre Comercio es moneda de cambio, la negociación tendrá que ser global”.
Indicó que se debe mantener el orden y el respeto a los derechos humanos en los 11 puntos fronterizos de repatriación terrestre.
VOA
