El caso sin duda ha causado consternación en el país sudamericano, debido a la forma en que la víctima perdió la vida, pues no solo recibió las 14 puñadas, sino también fue degollada en junio del 2021.
De acuerdo con las fuentes extraoficiales consultadas por Primer Impacto, el delincuente confesó que es el culpable del crimen y que lo hizo porque estaba obsesionado con la pequeña.
Ana Isabel Guerra, madre de la menor de edad, aseguró que presintió que algo malo le ocurrió a su hija, luego de soñar con ella bañada en sangre.
Todo ocurrió cuando la niña estaba sentada afuera de su casa y apareció Carlos, quien la convenció de que fueran a cortar mangos.
Después, los familiares notaron su ausencia y comenzaron a preocuparse porque no era normal que desapareciera por tanto tiempo. Posteriormente, pusieron una denuncia del hecho.
Sin embargo, fue tanta la desesperación de los padres de la niña que pidieron la ayuda de sus vecinos para buscarla apenas amaneció.
En ese sentido, el cuerpo sin vida de Hernández fue encontrado una hora después entre algunos arbustos.
Según detalles de la autopsia que le realizaron a la víctima, recibió 14 puñaladas por la espalda.
El hombre confesó, según Primer Impacto, que mató a la niña porque le dio un ataque de celos ya que ella se detuvo a platicar con otro joven.
Por otra parte, algo que causó la indignación de los seres queridos de la niña es que su asesino estuvo presente en su sepelio en Venezuela. En un video se observa cómo el sujeto aparenta ser uno de los más afectados por el crimen.
"Él se revolcaba. Estuvo allí con nosotros", dijo José Antonio Hernández, padre de la fallecida.
Con información de Primer Impacto