El mandatario ya había firmado la regulación el 7 de diciembre de 2020, según una copia del documento publicada en el sitio web oficial de la Secretaría del Ministerio de Estado durante el pasado fin de semana. El reglamento es una continuación del implementado en 2016 sobre protección infantil que aún se encuentra vigente
El mismo permite la castración química mediante inyección u otros métodos a los condenados por obligar a menores a tener relaciones sexuales con ellos o con otras personas.
No será para todos
La sustancia química atenuará la libido de los agresores sexuales hasta por dos años. El castigo se impondrá si el delito involucra a más de una víctima y si produjo lesiones graves, trastorno mental, enfermedades infecciosas, alteración o pérdida de las funciones reproductivas y/o la muerte de la víctima, según consigna el medio local Jakarta Globe.
Dicha ley se aprueba como método para reducir los delitos sexuales contra niños y adolescentes. La medida fue respaldada por el Parlamento, también incluye el seguimiento electrónico de los acusados para verificar el cumplimiento de la condena.
El presidente Widodo dijo que la Constitución “respeta los derechos humanos, pero cuando se trata de crímenes sexuales no puede haber concesiones. Vamos a ser duros y muy firmes, y daremos el máximo castigo por crímenes sexuales”. “En mi opinión, la castración química, si se aplica de forma consistente, reducirá los delitos sexuales y con el tiempo los barrerá”, añadió. Varios casos llevaron a las autoridades a tomar ese tipo de medidas, como el de una adolescente de 14 años que fue violada en grupo y luego asesinada en una escuela en Sumatra, al oeste del país.