El sufrimiento de Cassandra Ojeda, madre de la recién nacida, inició desde el pasado siete de agosto, cuando acudió al centro de salud El Pípila, ubicado en la avenida Las Torres 2 de la colonia El Pípila, en México, donde a Emma Isamar le aplicarían las vacunas que le correspondían, Neumococo y Hepatitis, refiere el medio de comunicación Cadenas Noticias.
''Todo lo que le pasa es causa de la vacuna del neumococo porque estaba contaminada, el resultado del examen de médula espinal, descartaron meningitis'', aseguró Casandra.
La bebé desde entonces lloraba incesantemente, no quería comer, la madre pensó que era producto de las inyecciones, pues es la reacción que suelen tener muchos niños.
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Sin embargo, al día siguiente, específicamente a las 5:00 de la mañana, la menor no reaccionaba y empezó a convulsionar.
Paro cardiaco
Ojeda desesperada la trasladó a la sala de urgencias de la Cruz Roja, ahí la entubaron, le pusieron catéter lumbar y le hicieron transfusión de sangre, se indica en el reporte de Cadenas Noticias.
Le realizaron diferentes exámenes para descartar meningitis. Una de las tomografías reflejó que tenía el cerebro inflamado a causa de las convulsiones.
En el proceso presentó mejoría, pero cuando trataron de desentubarla, presentó complicaciones y sufrió un paro cardíaco, pero lograron reanimarla.
Días después le dicen a Casandra que su hija tiene neumonía y su pulmón derecho tiene un poco de leche.
Después de batallar por su vida, durante varios días, Isamar se rindió ante la muerte el pasado 17 de agosto.
“Me dueles en el alma mi pequeña muñequita, pero Dios te necesitaba y ya estás con él. Siempre serás nuestro angelito más lindo", escribió Casandra, quien hasta la fecha sigue exigiendo justicia.
