Hvivo, la compañía propietaria del laboratorio en el Centro de Innovación Queen Mary BioEmpresas en Whitechapel, en el este de Londres, es la que llevará adelante la investigación.
Antes de que puedan participar, los voluntarios serán interrogados sobre su historial médico y se les harán todo tipo de análisis y también serán examinados para asegurarse que no tengan ya anticuerpos contra el coronavirus.
Los participantes serán controlados regularmente por médicos con equipo de protección mientras estén en cuarentena durante 14 días.
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John Oxford, experto en virología de la Universidad Queen Mary de Londres, dijo a los medios que los voluntarios desarrollarán los síntomas de la tos o el resfrío, similares al del COVID-19.
Los voluntarios se infectarán con las cepas 0C43 y 229E del virus, ambas mucho menos graves que la que causa el Covid-19. Se estima que combatiendo estas cepas que son menos peligrosas con una vacuna se podrá hacer frente también al Covid-19 y terminar con el pánico global.
La investigación es parte de un esfuerzo mundial de 2 mil millones de dólares para encontrar una vacuna contra el virus que contagió a más de 110.000 personas y provocó la muerte de 3.832 en más de 100 países.
Vacuna para prevenir coronavirus
Los expertos esperan que la vacuna pueda ser usada en el próximo invierno para proteger a los ancianos y a aquellas personas con problemas de salud preexistentes.
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Andrew Catchpole, de Hvivo, dijo al diario The Times: ”Todos hemos estado expuestos a muchos coronavirus, lo que significa que podríamos tener algún tipo de inmunidad contra ellos”.
Fuente:Infobae
