Bachelet, en su intervención en la sesión número 43 de la Organización de Naciones Unidas que se llevó a cabo Ginebra, Suiza, pidió al gobierno de Nicaragua el cese de la represión y del asedio en contra las voces disidentes al oficialismo, además de la liberación de los 63 presos políticos.
“Defensores de derechos humanos, periodistas, opositores políticos, miembros de la iglesia, personas excarceladas en virtud de la Ley de Amnistía y personas víctimas de graves violaciones de derechos humanos sufren intimidación y acoso, esto incluye detenciones arbitrarias por parte de la policía, en ocasiones apoyados por elementos armados progubernamentales que continuarían operando con el consentimiento, complicidad y tolerancia de los actores estatales”, indicó Bachelet.
Repuesta de Valdrack Jaenstschke
Por su parte, el representante de Nicaragua ante el organismo internacional, Valdrack Jaentschke, después de escuchar la comparecencia de Bachelet, aseguró que se trabaja en la restitución de los derechos políticos, sociales, económicos, culturales y ambientales de la nación.
“La libre movilización y expresión política están garantizados para quiénes se expresan en paz y sin intenciones de perturbar la tranquilidad de la población”, dijo Jaenstschke.
Por otro lado, la alta comisionada destacó que aparte del asedio e intimidación que sufren los opositores, el gobierno obstaculiza el ejercicio a la libre manifestación.
“El derecho a las protestas pacifica de las voces disidentes al gobierno, sigue siendo sistemáticamente negado, al igual que el espacio público de participación se sigue restringiendo”, refirió la diplomática, quien, además, expresó su profunda preocupación por los continuos asesinatos en perjuicio de los campesinos.
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“Me preocupa la impunidad respecto a los más recientes homicidios de personas campesinas en el norte del país. Asimismo, mi oficina no conoce ninguna investigación penal abierta en contra de oficiales de la Policía Nacional o elementos progubernamentales por los hechos de abril del 2018”, denunció Bachelet.
A su vez hizo mención sobre los recientes ataques en contra de comunidades indígenas que son víctimas de masacres por parte de colonos, lo cual deja como resultado personas fallecidas, heridos, saqueos, y casas quemadas, situación que considera alarmantes.
Al respecto Jaentschke aseguró que Nicaragua cuenta con una de las legislaciones y practicas más avanzadas del hemisferio en materia de reconocimiento de Estado a los derechos de su población indígena y afrodescendiente”
“El estado de Nicaragua ha reconocido, delimitado y titulado 23 territorios indígenas y afrodescendientes, ocupando aproximadamente 37,000 kilómetros cuadrados, que representa alrededor del 31 por ciento del territorio nacional”, dijo el vicecanciller. Además, mencionó que a pesar de que hay personas que han intentado perturbar la estabilidad del país, continúa siendo una de las regiones más seguras.
“Nicaragua, según lo ha reconocido las Naciones Unidas, sigue siendo el país más seguro de la región. Nuestra estrategia de seguridad soberana ha posibilitado el derecho a vivir en paz y a pesar de que grupos políticamente mal intencionados financiados y protegidos del exterior han intentado perturbar el entorno pacífico de la nación”, continuó el vicecanciller.
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Jaentschke hizo un llamado a la comunidad internacional para que Estados Unidos suspenda las sanciones, pues dice que es una acción que violenta la carta de las Naciones Unidas y atenta contra los derechos humanos
En cambio, Bachelet exhortó al gobierno de Nicaragua a no hacer caso omiso de las recomendaciones brindadas por su oficina y otros organismos internacionales.