Desde su fundación, hace más de 39 años, es la primera vez que El Nuevo Diario cambia su formato tradicional estándar por uno más pequeño, obligado por el bloqueo ilegal de sus materias primas.
Aunque el Tribunal Aduanero y Tributario Administrativo de Nicaragua (TATA) ha emitido dos resoluciones a favor de El Nuevo Diario, ordenando a la Dirección General de Aduanas (DGA) que entregue los insumos retenidos a este periódico, esa institución pública solo liberó el 20% del papel y el 37% de la tinta, entre otras materias primas, el 8 de julio pasado.
El papel entregado en esa fecha solo incluye medias bobinas, de 11.5 pulgadas, conocidas como tripas, que se usan para la impresión de suplementos o periódicos tabloides.
En consecuencia, si a El Nuevo Diario se le imposibilita obtener sus materias primas en el resto del año, estaría en riesgo la edición impresa del periódico en el corto plazo. El bloqueo a este medio de comunicación, que el próximo 6 de agosto cumpliría 11 meses, atenta contra la libertad de prensa y el derecho de los ciudadanos a la información.
La Gerencia General de El Nuevo Diario ha insistido ante la DGA que cumpla la ley y entregue todos los insumos propiedad de este periódico, retenidos sin ninguna justificación técnica ni legal.
Mientras esperamos una respuesta de esa institución pública, pedimos a los lectores que nos disculpen por los inconvenientes que le causan estos ajustes al periódico