La falta de agua y alimentos y el deseo de supervivencia hacen que manadas de monos gongos estén llegando a Jinotepe, según Don William Ampié, que logró fotografiar a un grupo de estos animalitos en las cercanías del barrio El Dulce Nombre de Jesús el domingo pasado.
En su cuenta de Facebook, Ampié, narra que se dirigía al Rosario y prefirió hacerlo por la carretera al Dulce Nombre, llevándose la grata sorpresa de ver a los gongos deslizándose por las ramas de un árbol frutal que no logró precisar.
Los animalitos, obligados por el hambre y la sed ahora buscan lugares más frescos y arboles donde puedan comer al menos hojas, porque en Chacocente y el departamento de Rivas, los monos y otras especies se están muriendo de hambre y sobreviven con las pocas frutas y aguas que llevan grupos ambientalistas y algunas veces el Ministerio del Ambiente y recursos Naturales, Marena, que sigue minimizando el problema en Carazo.