El padre Juan de Dios García, párroco de la iglesia Santiago, de Jinotepe, denunció públicamente ayer domingo, haber recibido amenazas de muerte de parte de una persona acompañada de un grupo de comerciantes.
“La verdad es que no le tengo miedo a los que matan el cuerpo, como dice el Evangelio, a los que hay que temerles es a los que matan el alma y como cristiano yo lo perdono y vamos a orar por él para que el Señor pacifique su corazón”, dijo el sacerdote ante toda la feligresía que participaba de la misa dominical.
La actitud violenta de los comerciantes ocurrió el pasado jueves, cuando el Santísimo estaba expuesto, en reclamo porque los trasladaron al nuevo mercado y desalojaron de las aceras del templo, donde por años mantuvieron sus tramos, provocando el caos en las aceras y calles del centro histórico.
El Templo fue profanado
El sacerdote García ha expresado ante el pueblo católico que el templo fue profanado durante todos estos años con el quehacer de las ventas, la orina en sus muros, el ruido, los vicios, la basura y actos inmorales que muchas personas realizaban en los patios de la iglesia.
“A mí me tocó muchas veces andar sacando a las parejas que se venían a meter a los patios de día y de noche”, señalo el padre García.
La actitud de este grupo de comerciantes ha sido condenada por muchos jinotepinos que han pedido a las autoridades locales poner el orden en la ciudad, dado que la mayoría de vendedores no son originarios de Jinotepe, por lo tanto, aseguran, no quieren ver limpia la ciudad.
El religioso dijo que el pueblo entero apoyó el traslado porque desea orden, salud sicológica y del cuerpo, en vista de la insalubridad que mantenían estas ventas.
“Invito que hagamos a un lado cualquier tipo de violencia. El corazón que tiene odio es porque Dios no está presente en él. Se dice que esta persona es protestante, a mí no me consta, pero un católico por mucho odio que tenga en su corazón no va a venir a irrespetar la eucaristía”, expresó el padre Juan de Dios García.
El párroco anunció que una vez al mes dedicará la procesión del Santísimo, que se celebra los jueves, en desagravio a los años en que los alrededores de la iglesia permanecieron ocupados por comerciantes reacios a trasladarse al nuevo mercado.
A mediados de junio, los comerciantes que durante años ocuparon las calles principales de Jinotepe, se trasladaron a las instalaciones del nuevo mercado que se concluyeron desde hace varios meses. A finales de junio un grupo de vendedores ambulantes protestó, demandando espacio para ellos en las nuevas instalaciones.
Información de: Lucía Vargas La Prensa
