Las familias productoras de la región norte de Las Segovias, aún no pierden la esperanza de que en los próximos días comience a llover y de inicio al esperado invierno. Últimamente, solo se han registrado ligeras lloviznas que no motivan a comenzar la siembra de primera de maíz y frijol.
Las tierras ya se pueden ver con los surcos de arados a la espera de que el productor tire las semillas de maíz y frijol y de inicio a la siembra de primera que tradicionalmente comienza el 18 de mayo y concluye con la sacada de la cosecha a finales del mes de julio e inicio de agosto, en casi todos los 27 municipios que conforman los departamentos de Estelí, Madriz y Nueva Segovia.
De no llover en los próximos días sería un fuerte golpe para la economía de los hogares de los miles de pequeños y medianos productores agrícolas del campo por las pérdidas que genera la inversión en la preparación de las tierras, tomando en cuenta los actuales altos costos en los precios de los insumos. Esto tendría un efecto también en los consumidores que tendrían que comprar más caro el frijol y maíz para su consumo.
“Preocupa que las lluvias estén tardando. En esta misma fecha del año pasado, ya habíamos tirado la semilla porque llovía fuerte y ahorita solo han caído algunas lloviznas. Si usted ve hay mucha nubosidad en el ambiente, como cuando hay quemas, y eso es mala señal de que el invierno aun no llega”, explicó don Alfredo Martínez, productor de la zona de Miraflor, zona del departamento de Estelí.
Todos en espera
Según estimaciones de las autoridades del Ministerio Agropecuario y Ganadería (MAG) en el departamento de Madriz, más de 16 mil familias del campo alistan sus parcelas, entre cuatro y doce manzanas promedio cada una, mientras que en Nueva Segovia, se calcula que unas 21 mil familias campesinas siembran cada año. En el departamento de Estelí, aproximadamente son unos 17 mil productores los que cultivan sus tierras.
“Si no llueve en los próximos días no vamos a tener frijoles, ni maíz”, expresa preocupado don Alcides Lazo Moreno, productor de Mozonte, municipio de Nueva Segovia. “Ahorita el precio del quintal de maíz no baja de los 980 córdobas y el saco de frijoles rojo anda por los mil 360 córdobas, y ahí se van a mantener hasta mediados de junio, que si no llueve, se irán al alza”, advirtió.
Recordó que con un mal invierno, los primeros perjudicados son los productores y después los consumidores. “Nosotros los productores porque no vamos a tener ingresos y la gente, porque los comerciantes que tendrán semilla para vender, seguro le subirán el precio”, se lamenta Moreno.
Gran inversión
Actualmente cada productor campesino gasta entre 7 mil a 11 mil córdobas por manzana a cultivar. En años anteriores, invertían entre 4 a 6 mil córdobas. El problema es que ahora todos los insumos agrícolas han doblado sus costos. “Un saco de urea vale el doble de precio. Por ejemplo, el litro de gramoxone cuesta mil 200 córdobas y antes se compraba en 600”, expuso Héctor Vallecillo, productor del municipio de San Lucas, en Madriz.
Los productores aún no pierden la esperanza de que llueva pronto para empezar a sembrar, ya que sus fuentes de ingresos son la comercialización de la producción de maíz, frijol y sorgo o millón en cada cosecha de primera, postrera y apante en la región norte de Estelí, Madriz y Nueva Segovia.
