«Daniel (Ortega) y Rosario (Murillo) y su camarilla de aduladores se van a ir porque no tienen ninguna respuesta a los problemas reales de Nicaragua. Ortega se va a ir, no duden de eso, a la par que se vaya Ortega es importante atacar de fondo los otros problemas, como salir de las trampas de la pobreza. En pleno siglo 21 hay personas de primera y segunda clase y eso no es aceptable», manifestó Maradiaga, quien resaltó ciertas precariedades y exilio que sufrió desde su adolescencia.
El aspirante a la presidencia apareció ante los Consejos municipales, departamentales, distritales y regionales de la UNAB, a la vez indicó que inicia una nueva fase de lucha cívica, recorriendo casa a casa, barrios y comunidades con una campaña electoral «limpia», sin violencia.
Por otro lado, hizo referencia a que propone «la misma ruta de abril. No vamos a permitir el olvido, la impunidad, acuerdos a espaldas del pueblo, aterrizajes suaves, asumimos el compromiso de justicia a quienes fueron asesinados, encarcelados y torturados. El derecho a la verdad, a la memoria, a la no repetición. Exigir su libertad (de presos políticos) como una condición para ir a elecciones».
Durante su intervención los periodistas presentes le hicieron algunas preguntas entre ellas si aceptaría conformar una fórmula con Cristiana Chamarro, quien ya manifestó que también aspira a ocupar el cargo que actualmente tiene Daniel Ortega.
«Voy a invitar a que me acompañe como vicepresidenta la persona que el pueblo de más respaldo para esa posición». Terminó la entrevista, catalogando la pregunta de «sacada de la manga, malintencionada».
“Yo no estoy interesado en la vicepresidencia de la República, yo estoy interesado en ser el primer servidor de la nación”, dejó en claro.
Tanto Félix como Chamorro Barrios son firmantes del documento «Unidad Nicaragua Primero» que acuerda que los aspirantes presidenciales se medirán entre sí en un proceso participativo y apoyarán a la candidata o candidato único que resulte electo para correr en unas posibles elecciones en una casilla única de la oposición, aún no definida.