Por lo general, la laguna de Asososca sufre este cambio entre los meses de diciembre y enero. Debido al incremento de la fuerza de los vientos que se manifiesta en “ lo que provoca la mezcla entre la capa superior e inferior del lago. La combinación de las capas, la energía solar, el consumo de oxígeno (O) por la descomposición microbiana de la materia orgánica y la poca vida aeróbica produce un cambio de gases”, explica un estudio realizado por el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (INETER).
En ese sentido, además, libera elementos como metano, sulfuro de hidrógeno, o bien, ácido sulfhídrico, produciendo malos olores. Cabe mencionar que el estado normal del agua se restablece por sí mismo, aunque puede demorar de 1 a 2 meses.
Debido al fenómeno en la invaluable Laguna de Asososca, la Empresa Nacional de Acueductos y Alcantarillados, (ENACAL),permanece en vigilancia y monitoreo ante los cambios de color, sabor y olor, que se establecen por encima de la norma, a fin de considerar una posible suspensión de bombeo de agua a unos 30 barrios capitalinos.
Sin peligro
Hasta ahora, ENACAL anunció que no hay peligro en seguir abasteciendo a las familias del vital líquido, ya que conforme la experiencia esto se evaluará de acuerdo con la intensidad que genere el fenómeno en las próximas horas o días.
En una investigación elaborada por ENACAL a la que nombraron “Aspectos ambientales de la Laguna de Asososca que este recurso hídrico se localiza al Oeste de la ciudad de Managua, a 2.2 km del lago Xolotlán, entre las coordenadas 12 o 08´ latitud Norte y 86 o 19´ longitud Oeste. Es una de las fuentes principales de abastecimiento de agua potable con que cuenta la capital. Su origen se deriva de una erupción volcánica. Es la única fuente de agua superficial de cinco existentes en el departamento de Managua, de las que solo sus aguas son óptimas para su aprovechamiento y consumo.