“El costo de la canasta básica con respecto al salario mínimo está completamente rebasado”, afirma el economista Luis Núñez.
Asimismo, otros economistas independientes han advertido que, con el salario mínimo promedio en Nicaragua, de 6,166.22 córdobas (190.38 dólares), se cubre solo un 45.4 por ciento de la canasta básica.
“La canasta básica es solo una referencia y el problema profundo es el desnivel de salario y de empleo en Nicaragua”, recalca Núñez.
El salario real es la capacidad de compra que tiene un trabajador con la cantidad de dinero que le queda cada mes, tras descontarse del salario nominal el impacto inflacionario, impuestos y cotizaciones.
Por ejemplo, un nicaragüense tiene un salario nominal de 6,000 córdobas mensuales, pero los precios de los alimentos y bienes servicios se elevaron en el año 5 por ciento, y nunca recibió un ajuste, eso implica una pérdida en la capacidad de compra de bienes y servicios antes del aumento inflacionario.
Banco Central y las cifras
Esa es precisamente la cifra que el Banco Central mantiene oculta desde hace más de un año, junto con el costo de la canasta básica, que está desactualizada desde julio del año pasado.
Según la última actualización, hasta febrero del año pasado, el salario real de los trabajadores del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social se ubicaba en 4,767.3 y para los trabajadores del Estado en 5,124.4 córdobas.
En tanto, para adquirir los 53 productos que integran la canasta básica hasta julio de 2019 se requerían 14,159.8 córdobas, lo que representa un aumento significativo con relación a marzo, cuando entró en vigencia la severa reforma a la Ley de Concertación Tributaria. Hasta ese mes el costo de la cesta familiar ascendía a 13,660.58 córdobas.