“El colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca + durante su visita in situ en la línea fronteriza de Peñas Blancas constató que más de 400 nicaragüenses se encuentran varados en dicho lugar, bloqueados por las fuerzas antimotines de Nicaragua”, indicó Wendy Quintero.
Cabe destacar que en este grupo de nicaragüenses que hoy cumplen 8 días en la intemperie se encuentran 2 mujeres embarazadas que han recibido atención médica de la Cruz Roja de Costa Rica, por presentar desmayos.
Hasta el momento, el gobierno de Daniel Ortega lo que solicita a sus ciudadanos es que se les realice la prueba de Covid-19, para ingresar al país, un protocolo sanitario que debe ser ejecutado por el gobierno nicaragüense, pues son sus conciudadanos los que intentan hacer uso de su derecho: ingresar y salir del país cuando lo deseen, sin embargo, estos habían notificado a través del Ministerio de Salud, Minsa, que tenía un costos de 150 dólares, a pesar de que ha habido miles de donaciones de las mismas.
Policías nicas han actuado violentamente
Cabe destacar que el colectivo, además, denuncia las condiciones deplorables en que estos se encuentran, pues no tiene acceso a agua potables, expuestos al sol, lluvias, tienen a su disposición solo un servicio higiénico, están sin alimentos y sin poder bañarse, explicó Quintero.
No obstante, estos han sido víctimas de violencia por parte de agentes de la Dirección de Operaciones Especiales Policiales (DOEP), además amenazados, por realizar denuncias antes los medios de comunicación y el colectivo.
“Verificamos también que varias de las personas que ejercieron vocería denunciando lo que estaba sucediendo tanto al colectivo como el medio de comunicación fueron amenazados forzándolos a retornar y solicitar protección internacional la Costa Rica, en esta lógica represiva observamos que agentes policiales y de migración nicaragüense tomaban fotos y videos a quienes interactuaban con defensoras y periodistas”, dijo Quintero.
