El polvo del reconocido desierto podría permanecer hasta el próximo 27 de junio, los expertos han indicado que en Nicaragua habría afectaciones al respecto, pero no de gran magnitud. De igual forma piden tomar las recomendaciones y medidas necesarias, para las personas que son más sensibles a padecer afectaciones respiratorias, aun más en este contexto que el mundo enfrenta la pandemia del Covid-19.
Los expertos explican que estos fenómenos no son eventos anormales, ya que la NASA indica que una de las características de éstos, es su paso entre los meses de junio y agosto. Algunos de los efectos visuales que ofrece este fenómeno es que pueden producir puestas de sol deslumbrantes.
A la vez, los especialistas han afirmado que parte de estos efectos pueden beneficiar zonas selváticas, produciendo calcio, magnesio, carbonatos y abono en estas áreas. El fenómeno actúa también como un efecto invernadero, que absorbe y dispersa la radiación solar que llega a la atmósfera, produciendo calores sofocantes.
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Esta gran nube de polvo podrá causar en algunos países de la región problemas de visibilidad y de respiración a algunas personas, por lo que el uso de mascarilla por la pandemia del Covid-19 ayudará a proteger de los microorganismos que podrían afectar a la salud.
Asimismo, se pueden producir trastornos respiratorios debido a sus partículas inhalables que son menores a las 10 micras, que pueden quedar en el tracto respiratorio superior, provocando enfermedades.
Alergias y gripes persistentes .
Estas tormentas cuando logran concentrarse y alcanzar áreas pobladas de Europa y América, pueden provocar la aparición de alergias y crisis asmáticas en muchas personas, sobre todo aquellas que ya sufrían problemas respiratorios o de inmunodepresión. Muchas veces se refieren casos de "gripes" persistentes o alergias sin causa aparente que pueden haber sido provocadas por el contacto con partículas de origen biológico presentes en estas brumas.
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Este pasado lunes se reportó que el polvo llegó a Honduras y las autoridades comunicaron que podría producir «un cambio de color del aire, volviéndolo más oscuro»; mientras que las partículas «reducirán las condiciones para formación de nubes y precipitaciones durante esta semana, principalmente entre jueves y viernes».
La arena del Sahara se levanta cuando el aire cálido del desierto choca con el aire más fresco de la región de Sahel - justo al sur del Sahara. Mientras que las partículas ascendentes se remolinan, los vientos alisios intensos comienzan a soplar hacia el oeste en el Atlántico Norte. Las tormentas de polvo se forman, sobre todo, durante los meses del verano y del invierno.
