Asimismo, se conoció que en algunos de los casos, sus padres, además de matar a sus madres posteriormente se suicidan.
De acuerdo con los datos proporcionados por el Organismo, de enero a abril del 2020 contabilizan 21 mujeres muertas a causa de este fenómeno, en dos de esos casos el femicida se ha suicidado.
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Sin embargo, en esta cifra no se encuentra en la lista la muerte de una mujer de 37 años producto de las graves heridas que le provocó su pareja con un machete.
El hombre era buscado por las autoridades policiales debido al crimen, pero horas después encontraron el cuerpo colgado en un árbol, ambos procrearon tres hijos, quienes se suman a la lista de los 31 menores que quedan en la orfandad.
El hecho se reportó el pasado jueves 21 de mayo en horas de la tarde, en Chontales.
En redes sociales circularon las imágenes de Yuritza del Carmen Velázquez, de 37 años, cuyo rostro estaba desfigurado y además presentaba graves heridas.
Muchos femicidas logran escapar de la justicia
Aún con vida la trasladaron a un hospital, pero horas después se rindió ante la muerte.
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Efectivos de la policía estaban en la búsqueda de la pareja de la ahora fallecida, Melvin Sandoval Centeno, de 45 años, pero lo encontraron colgado de un árbol en un predio montoso, en la comunidad El Coral, que pertenece al departamento de Chontales, donde cometió el delito.
En algunos de los casos el femicida se da a la fuga, quedando en la impunidad el delito, otros deciden quitarse la vida y otros enfrentan la justicia, sin embargo, parte de la cruda realidad presente en estos actos de violencia extrema contra las mujeres por el hecho de ser mujeres, producto de la violencia machista, es que un número significativo de niños ahora afrontan una vida sin su madre y sin su padre, quienes en su mayoría son los autores del femicidio.
