Entre las medidas a tomar está que vez del lavatorio de los pies que se acostumbra realizar para emular la acción de Jesús con sus discípulos en la última cena, el Jueves Santo el sacerdote lavará las manos de los fieles “como expresión del servicio de la Iglesia en la preservación de la salud y vida del pueblo de Dios”.
Otro punto importante del comunicado es que decidieron suspender el Vía Crucis Penitencial del Viernes Santo, con la imagen de la Sangre de Cristo.
“A los fieles se les invita a seguir las meditaciones del Vía Crucis que serán transmitidas por los medios católicos”, especifica el documento.
La notificación propuesta este miércoles 18 de marzo insta a buscar alternativas que contribuyan a preservar el don de la vida de los nicaragüenses.
Además, señala que las diversas instituciones del país deben adoptar diferentes mediadas que cuiden la salud de los trabajadores y sobre todo la unidad para sobrellevar la crisis y ser conscientes del valor que tiene la vida.
Como parte de sus mediadas, la conferencia Episcopal, insistió en que las personas vulnerables a esta enfermedad, como los ancianos y las personas con enfermedades crónicas, no asistan a las celebraciones litúrgicas.
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Dado a que no sea han tomado medidas generales por parte del gobierno nicaragüense para evitar la pandemia, la iglesia católica tomó sus propias medidas.
Según la Organización Mundial de la Salud, el COVID19 afecta a más de 159 países, donde hay más de 179,843 personas infectadas y más de 7,176 muertos.
En Nicaragua aún no se registran oficialmente casos de coronavirus. Sin embargo, su presencia es inminente, dado los contagios documentados en los países vecinos, donde se reportan muertos en Honduras, Panamá y Costa Rica.
