La pareja de Pineda informó que el nicaragüense, residente en Estados Unidos, había estado luchando con sentimientos de tristeza y ansiedad que, lamentablemente, lo llevaron a tomar la fatal decisión. El fallecimiento de Pineda deja a tres hijos en la orfandad, situación que ha movilizado a la comunidad, expresando sus condolencias y solidaridad con la familia.
Este caso destaca los desafíos de salud mental que enfrentan muchos migrantes lejos de su tierra natal, y recuerda la importancia de brindar apoyo emocional y psicológico a quienes atraviesan momentos difíciles en el extranjero. La comunidad nicaragüense en EE. UU. ha lamentado profundamente esta pérdida, reflexionando sobre la necesidad de acompañar y asistir a quienes se ven afectados por problemas de salud mental.