Espinoza, quien actualmente forma parte de la plantilla del Walter Ferreti, nació en San Marcos, en 1983.
“Mis condiciones físicas están al 100%, gracias a mis entrenadores y a Dios que me mantiene alejado de las lesiones”, dijo a medios oficialistas el Pulpo Espinoza, quien fue el mejor portero de Liga Primera-2020.
Sus primeros acercamientos como futbolista profesional los tuvo en su natal San Marcos, luego cuidó desde los tres postes al Cacique Diriangén. A su actual club llegó desde el 2008.
En su trayectoria, el guardameta tiene el récord de más minutos de manera consecutiva sin permitir gol (747 minutos) en la primera división de Nicaragua, establecido en la temporada 2014.
Él menciona que cada vez que pisa el césped, el cariño de la fanaticada lo ha hecho sentir como un ídolo especial del Walter Ferreti.
“El respeto, cariño de la gente, de la crónica y ser reconocido por la juventud. Lo importante es dejar un legado. Cuando me vaya del futbol, me voy satisfecho”, dijo Espinoza.
Volvió a la selección después de ser señalado de amaño de partidos
Los momentos más difíciles son las derrotas, pero el estar ausente en la selección nacional es algo que lo marcó. Tanto que cuando lo volvieron a convocar las lagrimas se hicieron incontenibles, debido a la emoción.
“Sí, porque me habían excluido de manera injusta, porque los méritos los tenía. Me emocioné cuando vi la convocatoria y mi nombre en ella”, comentó.
En su carrera internacional Espinoza debutó con Selección de Nicaragua en un partido amistoso del 2004 contra Bermudas. Ha estado en eliminatorias mundialistas, Copas de Naciones de la UNCAF, Copas de Naciones y Copa Oro.
Consiente del talento que hay en Nicaragua, una vez que se retire y deje de usar los guantes con los que ha atrapado muchos intentos de goles tiene planes de apoyar a los jóvenes.
“Cuando me retire seguiré ligado al futbol, me gustaría crear una escuela de porteros, porque el talento existe, pero falta explotarlo”, concluyó.