El equino resbaló debido al lodo acumulado, provocando la caída que dejó a don Rufino atrapado en el fondo de la zanja. Sus gritos de auxilio alertaron a los lugareños, quienes acudieron rápidamente al lugar para rescatarlo.
“Gracias a Dios estoy vivo. El caballo se resbaló y me cayó encima, me estaba ahogando, pero estoy bien, solo unos golpes en algunas partes del cuerpo, nada más. Yo estaba prensado, estaba afligido porque yo gritaba y nadie me escuchaba”, relató don Rufino, aún conmocionado por la experiencia.
El rescate fue grabado por uno de los vecinos y rápidamente compartido en redes sociales, donde generó gran impacto entre los usuarios.
Afortunadamente, don Rufino no sufrió lesiones graves, y aunque se encuentra adolorido, agradece haber salido con vida de este accidente. Su historia se suma a las anécdotas que recuerdan la importancia de extremar precauciones al montar a caballo, especialmente en terrenos difíciles y resbalosos.