El alto costo de la vida seguirá golpeando los bolsillos de los nicaragüenses este año. Granos básicos, lácteos, huevos, carnes, verduras y legumbres continuarán su espiral alcista, advierten comerciantes de Madriz y Nueva Segovia.
“Qué barbaridad, como han subido las cosas”, se queja doña Consuelo Herrera Peralta, una maestra jubilada que habita en el sector 18 de la ciudad de Somoto, cabecera del departamento de Madriz. “Me encuentro que la libra de papa está a 50 córdobas, antes valía 20. También la chaya, ya anda por los 15 córdobas cada una, y no digamos el queso, la crema, los huevos, los frijoles y demás productos están por las nubes y con lo poco que uno recibe de la pensión no ajusta para comer”, se lamentó.
Contó que su pensión es de apenas 5 mil córdobas mensuales. “Mi esposo trabaja de albañil y mi hijo mayor está en España, el otro que le sigue se fue en diciembre a Estados Unidos, todavía no ha llegado, porque está estancado en México, pero ni con remesas ajustamos para pagar los servicios de agua, luz, cable y comida. Ahora tenemos deudas con los que prestaron dinero (dólares) para que mi último hijo se fuera con coyotes a buscar mejor vida”, agregó.
Lo que sufre Herrera Peralta, lo padecen decenas de familias. Se declaran “asustadas” al ver como al iniciar el año nuevo, muchos productos de consumo alimenticios han subido de precios en los mercados, pulperías, puestos o establecimientos comerciales y distribuidoras, afectando cada vez más los bolsillos de la gran mayoría de los hogares nicaragüenses. Esperaban que bajaran.
Nuevo año, mismos problemas
“Productos de la cena para la última noche del año como la papa, costó entre 40 y 50 córdobas la libra, antes se vendía entre 20 o 35 córdobas”, señaló el comerciante Franklin Ramírez, propietario de un puesto de verduras y legumbres cerca del mercado municipal de la ciudad de Somoto.
Ramírez añadió que la cajilla de tomates, subió también de precio al comprarse entre 500 y 600 córdobas. “La libra de tomate que estaba a 10 córdobas ahora cuesta 20, mientras que la chiltoma que estaba a 60 córdobas la docena, ahora se ofrece a 90, y la chaya a 15 la unidad, mientras que la libra de zanahoria se vende en 20 pesos”, terminó diciendo el comerciante somoteño.
Tanto Vilma López como Edgardo Alvarado, ambos consumidores somoteños, coincidieron en señalar que los principales productos de consumo alimenticio han subido de costos haciendo más difícil la sostenibilidad familiar. “Todo ha subido, ojalá que este año las cosas bajen. Cada vez comemos menos”, dijo López. Mientras, Alvarado sostuvo que “así como van las cosas, se pondrá difícil la vida este año que estamos comenzando”, señaló.
Reina pesimismo
Para don Javier del Socorro Ramírez Lazo, de 39 años, las cosas empeorarán este año. “No todo es culpa del gobierno, el problema es mundial por la pandemia del coronavirus, la guerra de Rusia contra Ucrania y otros problemas mundiales que también impactan en nuestro país. Todo se ha puesto caro y se seguirá poniendo peor este 2023”, reiteró Ramírez Lazo, habitante del barrio Sandino de la ciudad de Ocotal, Nueva Segovia.
“Las alzas constantes en las verduras y legumbres y otros alimentos están golpeando severamente la economía de los hogares de muchas familias aquí, ya que ven que cada día sus recursos económicos no ajustan para adquirir estos productos de consumo”, señaló Buenaventura Ordoñez, consumidor ocotaliano, quien agregó que antes, gastaba 3 mil córdobas y ahora necesita el doble para poder suplir de alimentos a su hogar de cuatro integrantes.
“La subida de precio de los productos de consumo familiar se debe a que los horticultores invierten más en los insumos y fertilizantes que también ha subido de precios encareciendo más los alimentos”, finalizó diciendo el comerciante minorista de las inmediaciones del mercado ocotaliano, Elmer Benavidez Rodríguez.
