El hecho ocurrió en horas de la madrugada del 18 de febrero, cuando el sueño de Fernández fue abruptamente interrumpido por Justiniano, quien en estado de ebriedad le exigió que le diera dinero.
Ante la respuesta negativa de su progenitora, comenzó a agredirla físicamente, con el propósito de salvar su vida ella salió de su casa a pedir ayuda, pero Ramos le lanzó varias pedradas, impactándole certeramente en la cabeza, falleciendo de manera instantánea en unos cafetos.
La ahora fallecida pedía dinero para solventar sus necesidades básicas. Las autoridades se hicieron presentes para realizar las averiguaciones, asimismo se encuentran en la búsqueda del presunto parricida quien huyó de la escena del crimen.
Dos casos similares al de la señora Felicita Fernández se han reportado en lo que va del año. El primero corresponde al de Martha Gómez de 50 años quien falleció el pasado 27 de enero en la comunidad Zinica del municipio de Waslala.
Parricidio en Waslala
De acuerdo con la acusación de la fiscalía fue asesinada de varias puñaladas, cuando se dirigía a llevarle comida a su hijo Denis Denis Flores Gómez y éste la atacó con un arma blanca. El cuerpo presentaba dos estocadas en la cabeza y otra en la región púbica, además signos de estrangulamiento en el cuello.
Según Flores Gómez lo hizo porque , su progenitora lo regañó por desperdiciar un quintal de arroz y de azúcar
A mi madre, a mi propia madre, ahora si soy un asesino mortal” Confesó a través de un video que circuló en las redes sociales.
El sujeto además refirió que no solo pensaba matar a su madre, sino a otros familiares.
“Pensaba palmar, a mi abuelo, a mis tios, a tres de mis tios ” dijo Denis Flores Gómez.
Él fue denunciado por Maryuri Flores Gómez, de 18 años, quien dijo que su hermano padece de esquizofrenia, sin embargo pidió a las autoridades apoyo ya que teme por su vida.
Parricidio en Estelí
Dos días después José Manuel Cruz Espinoza de 37 años asesino a su progenitora, la señora Domitila Espinoza Arteta de 52 años con un madero en la cabeza
El sujeto ya había estado en prisión. Por su parte la señora vendía tortillas.
