Tras la llegada de mayo, que es cuando inicia el invierno en Nicaragua, también llegan los problemas de inundaciones, casas anegadas, ríos y cauces rebalsados, de igual manera el problema de la basura que colapsa en las diferentes ciudades del país y en ese sentido Masaya es una de las más vulnerables, pues las recientes lluvias que cayeron dejaron sus calles con toda la basura expuesta.
Walter Solís, quien a diario sale a realizar diferentes diligencias por la ciudad, asegura “sentir vergüenza” cómo la basura tiene un mal manejo por parte de la población y la negligencia de las autoridades edilicias, porque los desechos no solo se acumulan en las calles, también en los centros de comercio donde convergen los compradores porque en muchos lugares no hay recipientes para depositar la basura, por lo que deciden botar los desechos en los cauces.
“Hay casos en que un día la Alcaldía limpia los cauces y al día siguiente vuelve a estar sucio y eso es inaudito. Creo que al igual que en otros países aquí se debe de establecer una política de multa a las personas que tiran la basura en cualquier lugar, ya vimos que en las primeras lluvias que cayeron en abril se desnudo el desastre de la basura en Masaya y no dudo que las próximas lluvias van a traer consecuencias graves a la ciudad, pues la naturaleza nos va a cobrar factura, porque veo mucha basura plástica y materiales de poroplast. Hagamos una campaña permanente junto a los medios para quitarnos esa mala fama de ser la ciudad más sucia de Nicaragua”, motivó Solís.
Cada año basura aumenta
El exconcejal opositor, Sergio Rosales, asegura que este problema va “subiendo de tono” y cada año la basura al parecer va aumentado y debe ser tratado con seriedad por parte de las autoridades municipales de la ciudad porque en su momento recomendaron hacer un plan en conjunto con el Ministerio de Educación y las instituciones que velan por el medio ambiente, pero no se llegó a ningún tipo de acuerdo, incluso se planteó el proyecto de generar energía con los desechos.
“La basura ha sido el ‘talón de Aquiles’ de los masayas, porque es el adorno de la ciudad y da mal aspecto a la visita, porque usted la ve en las calles, andenes, mercado, incluso en la rotonda de San Jerónimo, que se ubica en la entrada de la ciudad, vas a encontrar mascarillas, platos y vasos desechables y eso también es un problema de educación de la población, pero si van a otro país no ensucian las calles”, sostuvo Rosales.
Agrega que todos los desechos que las corrientes arrastran durante la estación de lluvia van a parar directamente a la laguna de Masaya, pasando por las pilas sépticas que son rebasadas, mientras la basura que tira la población en los cauces es tirada por las mismas corrientes a sus calles.
“También veámoslo desde el punto de vista de salud, porque se vuelve un criadero de vectores que a la postre perjudica a la misma ciudad. Otro asterisco en este problema es que no se les presta atención a los puntos de transferencias porque en muchos casos la gente no la deposita dentro, sino que por negligencia la deja tirada a un lado y después esa misma basura es jugada por los animalitos y luego queda expandida por las calles. Lo otro es sobre los camiones recolectores porque regularmente están con desperfectos mecánicos y eso afecta la continua recolección de la basura en algunos barrios, entonces la basura se descompone”, añadió el exfuncionario municipal.
Recomendó que en el núcleo familiar, los padres o tutores deben enseñar a los menores a depositar la basura en su lugar y la alcaldía debería tener un plan de manejo de esta situación junto las diferentes instituciones, donde también debe de estar involucrada la empresa privada porque en los supermercados y demás establecimientos ofrecen bolsas para llevar las compras, pero a la vez no hay ninguna campaña de concientización sobre el debido uso de los empaques.
Según Elizabeth Sequeira, miembro de Jóvenes Ambientalista, Nicaragua después de la temporada veraniega es inevitable presenciar la situación de inundaciones en diferentes sectores del país. El exceso de basura y sedimentos que la misma gente tira a las calles de manera irresponsable es algo que discutieron en el encuentro ciudadano 2022 que realizaron con la temática del invierno para promover la campaña: ¨Sí al reciclaje¨.
"Antes de la llegada del invierno se deben limpiar kilómetros de cauces revestidos y cauces no revestidos, canaleras donde se llegan a sacar hasta 70 mil toneladas de basura. Estamos siendo víctimas de nuestras malas acciones y decisiones. Es hora de que llamemos a la acción para que los gobiernos departamentales continúen trabajando con obras de drenaje pluvial", dijo Sequeira.
