Ya ha pasado un año de aquel trágico día pero la familia de esta presa política recuerda ese momento como si fuera hoy, ya que desde ese momento la vida cambió para su único hijo y su madre, quienes enfrentan grandes dificultades económicas y emocionales.
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"Nosotros le pedimos al Señor que pueda salir pronto, ya que su hijo y su madre la necesitan, Karla está muy mal de salud con sus problemas de la tiroide, está inflamada, al parecer la medicina que le dan en la cárcel no le cae bien y nosotros no hemos podido llevarle medicamento porque ahorita todos los que trabajamos en la familia estamos desempleados, solo logramos conseguir para llevarle algo de comida", comenta un familiar de la presa política de Masaya.
"En la segunda ocasión no se llevaron nada porque todo se lo habían llevado en la primera vez que fue detenida, tres motos, prendas, teléfonos, computadora y dinero en efectivo, todo lo que encontraron se llevaron y nada regresaron, como ella prestaba la dejaron enjaranada, en la segunda ocasión solo teléfonos porque no había nada más", lamentó el familiar.
Esperanzas tras las rejas
Con la reciente excarcelación de los cinco presos políticos originarios de la Isla de Ometepe, en Rivas, el pasado 25 de abril de 2021, las esperanzas se apoderaron de la presa política de Masaya.
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"Esperanzas solo en Dios porque los políticos solo jalan agua para su molino no se quieren unir, no hay confianza es decepcionante, y de los presos políticos nadie dice nada, nosotros como familia solo le pedimos a Dios por la libertad de todos los presos políticos que hay en el país porque es duro estar preso y tener un familiar detenido", revela la fuente.
Actualmente la familia de Karla no ha podido comprar los lentes que el hijo de esta necesita con urgencia, pues son muchas las necesidades y hay que priorizar la alimentación diaria, y de la de la secuestrada política.
El gobierno Ortega Murillo mantiene secuestrada a dos mujeres de la ciudad de las flores Karla Escobar y Julia Cristina Hernández, quienes tienen en común, además de estar detenidas, el tener un hijo a quien no pueden cuidar.
