El cuerpo con signos de violencia lo encontró su cuñada, Martha Hernández, en una quinta que la víctima cuidaba, en la calle El Calvario, del municipio de Nindirí, de donde también sustrajeron varios artículos de valor.
Everth, desde muy pequeño, ayudaba a su mamá en la venta de frutas en el mercado Ernesto Fernández, de la ciudad de Masaya.
Motivado por el deseo de superarse, decidió estudiar una carrera universitaria y actualmente cursaba su último año de licenciatura en enfermería, por lo que en un centro asistencial brindaba sus prácticas profesionales, sin imaginar que su sueño sería truncado.
"Él era un muchacho que vino desde pequeño aquí al mercado y no se metía con nadie, era muy trabajador y respetuoso. Además estaba en su último año de enfermería, de hecho ya brindaba sus servicios en un hospital, lo que preocupaba a su mamá, ya que tenía temor que se contagiara de Covid-19. Estamos impactados con tan mala noticia desde temprano, ojalá que capturen y paguen quienes lo mataron", dijo muy apesarada Cándida Flores, quien vende pescado a pocos metros del pequeño negocio de la familia de la víctima.
Robar un tanque de gas pudo ser el móvil
De manera extraoficial se conoció que hay dos personas detenidas, quienes supuestamente desde la noche anterior ingerían licor con el joven, originario del Valle de la Laguna de Apoyo. En las primeras horas de la mañana su cuñada observó que en el porche de la propiedad había varias botellas de licor y luego vio el cuerpo inerte del infortunado y con varios golpes en su rostro.
Mientras tanto, la policía investiga el hecho que tiene conmocionados tanto a familiares como a comerciantes del sector pescado, del mercado municipal, donde acostumbraba a vender frutas, junto a su mamá, el futuro enfermero. Se presume que el móvil del crimen es el robo, ya que en la quinta hacía falta el tanque de gas.
El cuerpo del fallecido lo trasladaron al Instituto de Medicina Legal para determinar las causas que provocaron la muerte de este joven.