"Queremos que la iglesia esté más segura, era un proyecto que tenía en mente desde hace rato y que la feligresía apoyó, es un muro minifalda, porque es de concreto y verjas, más que todo por algunas personas que utilizan esta parte de la Iglesia como urinarios y por los que quieren hacer daño a los templos", aseguró el padre Edwin Román.
La pequeña iglesias de San Miguel es uno de los templos más asediados en Nicaragua. Estuvo sitiada totalmente por la Policía Nacional, durante 14 días, cuando madres de presos políticos iniciaron una huelga de hambre demandando la libertad de sus familiares, en noviembre del año pasado.
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Asedio continúa
El día de ayer, jueves, 27 de febrero, durante la bajada de Jesús de Nazaret, patrullas de la policía y agentes antimotines se mantuvieron apostados frente a la Iglesia, durante toda la actividad religiosa, a la que asistieron muchos feligreses.
El padre Edwin Román, reconocido por la prensa independiente como el personaje del año 2019, siempre ha estado al lado del pueblo desde su iglesia, la cual pretende mantener protegida de quienes la irrespetan.
El padre Román sigue trabajando junto a su feligresía en las mejoras del templo que resguarda la imagen de San Miguel Arcángel, llamado el copatrono de la ciudad.
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Las iglesias San Juan Bautista ha sido víctima de profanación de simpatizantes sandinistas. En el 2016 y 2017 el templo del patrono de Masaya, San Jerónimo, también fue profanado, en la primera ocasión delincuentes ingresaron a robar objetos del Santísimo. Y otro día amaneció con pintas diabólicas. La iglesia San Jerónimo aún no tiene muro perimetral.
