La tarde del dos de julio de 2019 en un operativo policial Mendoza Valencia fue detenido y señalado de supuesta posesión de “bombas de contacto”. Su defensora, licenciada Nohemí Guerrero, denunció en el juicio realizado el pasado ocho de enero que la Fiscalía no presentó las pruebas contra el acusado.
“Hubo todas las violaciones al debido proceso como las evidencias de la fiscalía, la falta de un peritaje químico, eliminaron las pruebas por “seguridad”, supuestamente, pero omitieron la presentación de la evidencia, lo que deja sin efecto cualquier prueba. Los hechos investigados fueron ajustados en horas a la conveniencia de la Policía, lo que demuestra la manipulación”, aseveró la abogada defensora de derechos humanos.
La madre del preso político, Lucrecia Valencia, con lágrimas en su rostro, aseguró que su hijo es inocente y que este fue un montaje de la Policía. La falta de pruebas y testigos evidencian la inocencia del artesano del calzado.
“La Policía y Fiscalía mintieron en todo momento, porque en la acusación decían que mi hijo fue capturado en una de las calles del barrio, lo que es falso porque de aquí, de la casa, se lo llevaron preso y nada le encontraron. Por participar en marchas y apoyar a los jóvenes en las protestas es que el gobierno lo tiene preso”, dijo su progenitora.
La abogada defensora agregó que el proceso es parte “un vil montaje” del gobierno en contra de los que protestaron en esta ciudad. “Lo únicos testigos fueron policías y para colmo en los actos investigativos las actas las firmaron distintos agentes”, apuntó la licenciada Guerrero.
