El dictamen preliminar del Instituto de Medicina Legal reveló que doña María Angélica fue ultimada a través de la asfixia mecánica o sea estrangulada, con lo que se descartó que fue envenenada con una tableta de curar frijoles y luego acuchillada.
La muerte de María Angélica ocurrió el lunes en su casa situada en la colonia 14 de Septiembre, y fue descubierta por su hija Isidra Medina, luego de revisar la cámara de seguridad de su casa a través de su celular y observar a un hombre con mascarillas y guantes cargando el cuerpo de la señora.
Isidra dijo que su mamá vivía sola con ella. Su hermano Wilfredo tenía prohibido entrar a la casa porque hace dos años les robó 800 dólares y fue por esa razón que ella colocó cámaras de seguridad en toda la casa, para monitorear a su mamá a través de su celular.
Agregó que “cuando miré por la cámara al hombre cargando a mi mamá hacia mi cama, de inmediato llamé al celular de ella, pero nunca respondió, por lo que pedí permiso en el trabajo y me dejé venir rápido a la casa”.
Cuando Isidra llegó a la vivienda encontró a su hermano Víctor simulando reparar una bujía, y cuando le preguntó por su mamá se puso agresivo, sacó un cuchillo y la hirió en el brazo izquierdo. “Después vi que mi mamá estaba muerta en mi cama“, detalló.
La hija cree que su hermano planeó la muerte de su madre para robarle, ya que al momento de ser retenido con ayuda de los vecinos le encontraron en su poder 12 mil córdobas que doña María Angélica tenía guardados.
En el lugar se conoció que Wilfredo Manuel Herrera había venido en semana santa de Costa Rica a su casa ubicada en el reparto Schick, y desde entonces se había dedicado a tiempo completo al consumo de drogas y guaro.
De fuentes extraoficiales se conoció que este jueves será presentado ante una autoridad judicial para ser procesado por el delito cometido.
