El suceso ocurrió en una casa del barrio San Cristóbal, localizado cerca de la garita norte en el distrito 6 de Managua, a donde el niño había sido llevado por su mamá, María Elena Peña, de 18 años, para ser cuidado por su abuela materna.
Al momento de caer al pozo el pequeño en la casa solo estaba una tía materna.
Testigos del hecho manifestaron que al caer al pozo sufrió severos golpes ya que lo que había en el fondo eran basura, piedras y poca agua.
Al ser sacado del pozo, el niño Elías Enoc Rojas aún presentaba signos de vida, y a pesar de los esfuerzos del personal médico del hospital Alemán por estabilizarlo y salvarlo, terminó rindiéndose ante la muerte.
Marcos Elías Rojas Salmerón, de 19 años, padre de la criatura, manifestó que esta tragedia se hubiera podido evitar.
El cuerpo del infante fue llevado al Instituto de Medicina Legal para determinar las causas exactas de su muerte.