Durante el juicio quedó demostrado que el pasado 10 de mayo, Carvajal Zamora, llegó a la vivienda, violó a su hija y luego la estranguló con una faja.
Se conoció que ese día, este sujeto se encontraba en el mercado de Masaya entregando una mercadería de la empresa donde laboraba, cuando recibió una llamada de su conyugue, informándole que su hija aparentemente se quería ir de la vivienda. El delincuente pido permiso y fue a matar a su hija.
Tras cometer el crimen, cubrió el cuerpo con un edredón, lo amarró con la misma faja y montó el cuerpo al asiento trasero del carro que conducía.
Para tratar de despistar, y hacer creer que su hija se había escapado con alguien, agarró una mochila y un saco pequeño, echó ropa y otros objetos personales y fue a botar el cuerpo a un basurero en Sabana Grande, Distrito VI de Managua y regresó a sus labores.
Al día siguiente prosiguió con su plan, se presentó a lugar del crimen a realizar el reconocimiento del cadáver de su hija a la que el mismo había asesinado.
El Ministerio Público solicitó a la Jueza Alyeda Irías que el hombre sea condenado a prisión perpetua, pero será ella que en los próximos días de la lectura de la sentencia.