Reyes Turcios relató detalles sórdidos del crimen, como el hecho de que el 30 de enero del presente año, invitó a la víctima a orar en un aula del colegio Cristiano Rosa de Sarón, en Sabana Grande, y cuando estaba con los ojos cerrados, sacó un cuchillo y le propinó varias estocadas en el cuello y en la región cervical, lo que provocó que el cuchillo se quebrara.
No contento con las heridas que le había hecho, se dirigió a buscar otro cuchillo para continuar hiriendo a la víctima, hasta que la asesinó. En total fueron 32 estocadas.
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Una vez que su víctima había expirado, el homicida dijo que le sacó la cartera que llevaba en el pantalón, en la cual guardaba 1,150 córdobas. Además, le robó un teléfono y una tablet.
Una vez que concluyó el crimen, Reyes se dirigió hacia un hospedaje de Managua. Posteriormente huyó pero fue detenido el 13 de febrero , por la Policía Nacional en Bilwi.
En las investigaciones, las autoridades también incautaron dos armas blancas utilizadas en el asesinato, las que el salvadoreño le robó a una señora que le alquilaba un cuarto.
Habilitado para predicar
Además, se dio a conocer que el hombre tenía antecedentes por el delito de robo y en la escuela cristiana el pastor Leber Mantilla lo había habilitado para predicar.
Aunque según la declaración del homicida, el infortunado fue asesinado desde el jueves 30 de enero en la noche, el cuerpo sin vida fue encontrado hasta el domingo 2 de febrero.
Durante la audiencia, el Ministerio Público solicitó 30 años de cárcel por el delito de asesinato agravado y 7 por robo agravado en contra de Mantilla .
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