La madre de la infante al darse cuenta de lo ocurrido se trasladó al centro de salud San Felipe, donde le dijeron que ya no había nada que hacer, pues no presentaba signos vitales.
La mamá de la niña se gana la vida palmeando tortillas para poder llevar el sustento económico al hogar. El suceso ocurrió en una vivienda en el reparto William Fonseca, en la ciudad de León.
Es cierto que administrar pastillas a niños puede ser un desafío, ya que los niños a menudo tienen dificultades para tragar comprimidos o cápsulas. Aquí hay algunas sugerencias para ayudar a los padres o cuidadores a administrar medicamentos a niños de manera segura y efectiva:
- Consulta a un profesional de la salud: Antes de administrar cualquier medicamento a un niño, es fundamental que un profesional de la salud evalúe la situación y recete el medicamento apropiado.
- Siempre sigue las indicaciones del médico: Asegúrate de comprender las instrucciones del médico o farmacéutico sobre la dosis y el horario de administración del medicamento. Si tienes alguna duda, no dudes en preguntar.
- Usa formas líquidas o masticables: Muchos medicamentos vienen en formas líquidas o masticables especialmente diseñadas para niños. Estas pueden ser más fáciles de administrar que las pastillas.
- Mezcla con alimentos o bebidas: Si un medicamento no está disponible en una forma líquida o masticable, consulta con el médico o farmacéutico si es seguro mezclar el medicamento con un pequeño volumen de alimento o bebida que el niño prefiera. Algunos medicamentos se pueden mezclar con compotas de frutas, puré de manzana o jugo, por ejemplo.
- Aplasta o disuelve las pastillas: Algunos medicamentos en forma de pastillas pueden triturarse o disolverse en una pequeña cantidad de agua y luego administrarse con una jeringa oral.
- Utiliza una jeringa oral o gotero: Las jeringas orales o goteros permiten administrar medicamentos líquidos con precisión y control, lo que puede ser útil para los niños.
- Recompensas y distracciones: Después de administrar el medicamento, recompensa al niño con un pequeño premio o elogio. También puedes distraer al niño con algo que le guste, como un cuento o un juego, para que se olvide del sabor del medicamento.
- No mezcles medicamentos sin consultar al médico: No combines medicamentos ni realices modificaciones en las dosis sin la aprobación del médico.
- Mantén los medicamentos fuera del alcance de los niños: Guarda los medicamentos en un lugar seguro, fuera del alcance de los niños para evitar ingestiones accidentales.
Recuerda que la seguridad y la eficacia son fundamentales cuando se trata de administrar medicamentos a los niños. Siempre consulta a un profesional de la salud antes de darle cualquier medicamento a un niño y sigue sus recomendaciones cuidadosamente.
