Los mensajes llegaron a la víctima a través de WhatsApp donde su supuesto amigo le expresaba que se encontraba en apuros ya que pretendía viajar de regreso a Nicaragua pero fue retenido en el aeropuerto de Bolivia, sin embargo sus maletas fueron enviadas al país y urgía de una persona para establecer contacto con la aerolínea y que sus maleta fueran entregadas.
La víctima confiando en el supuesto amigo quien sólo mantenía contacto con él por WhatsApp decidió echarle la mano, ya que las maletas supuestamente contenían dinero en efectivo y joyas que no quería perder, según le expresaron.
Fue a través de esta trama que el leonés decidió hacer el depósito por 650 dólares los que fueron enviados a Ami Jail Roca Miranda, representante de la presunta aerolínea, con destino a Santa Cruz, Bolivia.
Tras una nueva conversación el hombre quien se identificaba como Pablo Ernesto Villarroel Bustamante, representante de la agencia, le solicitó más dinero por la ausencia de declaración de las supuestas joyas y dinero por parte de su amigo "retenido en el aeropuerto" la víctima empezó a considerar que se trataba de una estafa, sin embargo los 650 dólares ya estaban en mano de los estafadores.
La víctima hace pública su experiencia para prevenir a otros ciudadanos que puedan ser contactados de esta manera, ya que tras las comunicaciones que establecen los estafadores cibernéticos hay aparentemente un estudio minucioso de la víctima y sus contactos que aparecen públicos en redes sociales.
La víctima al inicio pensó que realmente se trataba de su amigo ya que los mensajes que recibió fueron muy persuasivos.
En la actualidad las estafas cibernéticas están a la orden del día y toca cerciorarse antes de caer en un engaño.
