El crimen fue cometido el 16 de septiembre de 2020, en la microrregión Ayapal, municipio San José de Bocay, departamento de Jinotega.
En el mes de octubre de ese mismo año el juez Harold Leal, Cuarto Especializado en Violencia, condenó a 55 años de cárcel; sin embargo, la sentencia fue apelada por la defensa técnica del criminal.
El judicial sentenció a 25 años por la violación agravada y 30 por el delito de asesinato agravado en concurso ideal de aborto.
Apelación
“La defensa técnica considera que el judicial se extralimitó en la imposición de pena, siendo que impuso la pena máxima por cada uno de los delitos por los cuales procesaron a su representado”, menciona la apelación
“Es un hecho donde perdió su vida una ciudadana y el fruto de su vientre, hablamos de dos vidas que se perdieron en esta causa, aparte fue sometida en su integridad sexual al ser violada y asesinada de forma cruel. No bastándole al acusado asfixiarla, sino que también la apuñaló, el Ministerio público pide se mantenga incólume la sentencia dictada por el juez y la pena aplicada”, refirió la representante de la Fiscalía.
Sin embargo, los magistrados sustentaron en sentencia que el acusado al no ser pariente cercano de la víctima sólo existen dos agravantes del tipo penal.
“No es aplicable la circunstancia de parentesco al caso concreto, siendo que el acusado es tío del esposo de la víctima, siendo este tercer grado de afinidad, el cual según el artículo 37 CP, reconoce como parentesco hasta el segundo grado de afinidad”, refiere el documento
La condena por el delito de violación agravada fue reformada y dejada en 20 años.
