La señora Concepción Gutiérrez Mejía, habitante del barrio La Sabaneta en Granada, solicita ayuda urgente para solventar los gastos de su nieto Ian Tadeo Palacios Pérez, de 3 años de edad, quien sufre varios padecimientos que lo mantiene postrado en una cama y por lo que requiere de cuidados y alimentación especial.
Gutiérrez Mejía, cuida de su nieto desde que fue abandonado por su madre cuando fue diagnosticado con trastorno cerebral que le ocasiona epilepsia, y en los últimos meses, ha sido sometido a varios exámenes al presentar cambios en su salud.
El pasado 21 de noviembre fue dado de alta del Hospital Infantil La Mascota, en Managua, donde permaneció por 14 días en Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) tras presentar una fuerte hemorragia. El muchacho llegó con fiebre alta, diarrea y vómito.
Palacios Pérez llegó al Hospital Amistad Japón de Granada el 7 de agosto y sin ningún diagnóstico fue enviado a su casa bajo tratamiento médico. Sin embargo, empezó a descompensarse nuevamente, e incluso dejó de alimentarse. Todos los días vomitaba cada alimento que ingería.
Nuevamente fue llevado al Hospital de Granada, pero los médicos tuvieron que trasladarlo a Managua el 5 de octubre debido a la complicación que presentaba. Al llegar a La Mascota fue internado en la UCI.
Angustiada abuela
Los médicos daban pocas esperanzas de vida para el pequeño debido a que presentaba niveles altos de sodio y bajo en potasio, además de su trastorno epiléptico. Sin embargo, Palacios Pérez logró salir de la unidad que permanecía encerrado y aislado, y finalmente fue dado de alta, no obstante deberá asistir a chequeos médicos constantes.
Ahora su abuela, una mujer de escasos recursos económicos que se gana la vida como pequeña comerciante del mercado municipal de la gran sultana, clama a la población por ayuda para poder solventar los gastos médicos de su pequeño nieto, quien además es ciego y ha perdido el habla, por lo que su padre Jorge Luis Palacios, dejó de trabajar para ocuparse de sus cuidados.
“Necesitamos la lechita Pediasure, pañales, su medicamento para las convulsiones (que cuestan C$800); yo trabajo medio tiempo en el mercado y mi hijo no trabaja por estar cuidándolo, porque no podemos dejarlo solo”, expresa Gutiérrez Mejía.
La granadina dijo también que algunos médicos le han pronosticado un futuro incierto debido a que el padecimiento de su nieto es grave, y probablemente empeore durante su crecimiento. “Pido oración por la salud del niño”, finalizó la angustiada abuela.
Si usted desea colaborar con esta familia granadina puede comunicarse al número 8656-4586 con la señora Concepción Gutiérrez Mejía, o bien dirigirse a su casa de habitación que se ubica en el barrio La Sabaneta, del restaurante Colina Sur, 1 cuadra al lago y 4 cuadras al sur.
