La audiencia de juicio se efectuó la semana pasada, y continuará el próximo 11 de septiembre. Como parte de las pruebas acusatorias en contra del hombre de 42 años, la fiscalía presentó las pruebas de ADN del semen encontrado en el cuerpo de la víctima, cuyo resultado arrojó que corresponde en un 99.99% a Tomás Antonio Ramírez.
El juicio que enfrenta el sujeto Tomás Antonio Ramírez Cruz, quien era trabajador de un circo que estaba ubicado en La Libertad, Chontales; por la violación y asesinato de una niña de 11 años, continuará el próximo 11 de septiembre, luego que la Fiscalía presentara pruebas contundentes en contra del acusado de 42 años.
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Inicialmente, la Policía solo señaló a un adolescente de 16 años como el autor del asesinato y no informó sobre el segundo sospechoso, que era Tomás Antonio Ramírez Cruz, conocido como Shakira Miramar, y quien también laboraba para el circo Zuary. Ambos son originarios de Managua.
El juicio
La menor es identificada con las iniciales S.Y.N y la encontraron sin vida y con signos de haber sido violada en el municipio de La Libertad, Chontales, la mañana del pasado 18 de junio. El hecho que consternó a la población ocurrió específicamente en el barrio Miguel Medel.
En juicio, declaró un investigador de la Policía, Oliver Paniagua, según informó el Ministerio Público. El investigador detalló que el cadáver de la menor se encontró el 18 de junio «en un cauce que se utiliza para las aguas residuales, por lo que procedí a realizar la ocupación de evidencia que se tenía de la escena del crimen, como fue la vestimenta de la víctima”. La ropa de la menor estaba cerca del cuerpo, el cual fue tapado por los dos sujetos con tres grandes piedras.
“Posteriormente se trasladó el cuerpo al Centro de Salud de la Libertad, Chontales, para que el médico forense realizara la inspección junto con mi persona; logrando observar que la víctima tenía los ojos hinchados, tenía dos heridas en la ceja. Al terminar el médico forense requisó el cuerpo, le extrajo sangre, cabello y extrajo otras muestras, asimismo recorte de las uñas de la víctima, para posteriormente embalar las pruebas recolectadas para remitirla al laboratorio de Criminalística”, detalló el investigador policial en el juicio celebrado en Juigalpa.
