Según Luis Campos, "Este muñeco es elaborado con ropa vieja, cartón o papel, relleno de paja o aserrín y con frecuencia con artefactos pirotécnicos, para ser quemado a la medianoche, víspera del año nuevo en donde se reúne la familia Campos con grupos de amigos y vecinos, y exhibe la quema, generalmente nosotros elaboramos forma específica a un anciano con pelo canoso y arrugas, con expresión triste” manifestó
El muñeco es una manera simbólica para representar lo viejo y el inicio de lo nuevo que es una tradición en la mayoría de los países latinoamericanos.
“Un día antes estamos elaborando el viejo para que mañana las familias que pasen por la zona lo aprecien, nosotros tenemos más de 15 años de elaborarlo y siempre lo continuaremos haciendo."
Por otro lado algunos piensan que la quema de este muñeco a medianoche del 31 de diciembre según la tradición es un ritual de purificación para alejar la mala suerte o las energías negativas del período que termina, así como de transición pues también se celebra la llegada del nuevo año aboliendo lo anterior.